Hay quienes lo ignoran y quienes no pueden vivir sin él… pero, en cualquier caso, el jengibre encurtido siempre está ahí para acompañar a nuestro querido sushi. ¡Es indispensable!
¿El motivo? El gari -así se llama en japonés al jengibre encurtido del sushi de color rosa- es un magnífico ayudante para nuestro paladar. En este post te explicamos detenidamente por qué, para qué sirve y cómo se debe comer… ¡No te lo pierdas!
¿Qué es el jengibre encurtido?
El jengibre encurtido del sushi es jengibre marinado en vinagre de arroz con azúcar y sal, de color rosado y cortado en láminas muy finas. Su sabor es muy intenso y, su vida útil, larguísima gracias a la presencia del vinagre.
En Japón, suele servirse siempre junto al sushi, como sucede también con el wasabi. El por qué te lo explicaremos más adelante…
Aunque se puede hacer jengibre encurtido en casa partiendo de jengibre fresco, también puedes comprarlo directamente en frascos o sobres en el supermercado. ¡Es un ingrediente cada vez más extendido!
Origen del jengibre en la gastronomía japonesa
Probablemente lo más interesante sobre el jengibre encurtido del sushi es su origen. ¿Sabías que llegó a Japón por sus maravillosas propiedades medicinales? ¡Cómo lo lees!
Se originó en el sudeste de Asia y, desde allí, llegó al país nipón en el periodo Yayoi (300 a.C. - 300 d.C.). Al principio, se usaba sobre todo con fines medicinales, dentro de la práctica de la medicina tradicional china que tanto influyó en la cultura japonesa.
Con el tiempo, el jengibre pasó de ser una planta medicinal a un ingrediente culinario esencial en la gastronomía nipona. Se añadió en muchas preparaciones, por su sabor picante y su capacidad para neutralizar olores fuertes, estimular el apetito y favorecer la digestión.
Ahora, la forma más habitual de consumir el jengibre en Japón es el gari (jengibre encurtido del sushi), aunque hay muchas más. Por ejemplo, el beni shoga, que es jengibre rojo encurtido en vinagre de ciruela, también es bastante popular.
De cualquier modo, los japoneses asocian el jengibre con la pureza y la energía, y también con la prevención de enfermedades y resfriados. Su sabor picante y, al mismo tiempo, refrescante, representa el equilibrio yin-yang a la perfección.
¿Para qué sirve realmente el jengibre encurtido?
Ahora sí, toca responder a la pregunta del millón: ¿para qué sirve el vinagre encurtido del sushi? Básicamente, este ingrediente nos permite limpiar nuestro paladar entre pieza y pieza. Gracias a su intensidad, nos ayuda a dejar atrás los sabores anteriores y prepararnos para probar nuevos sabores, algo esencial en la gastronomía nipona.
Por eso, lo que recomiendan los expertos es tomar una lámina de jengibre encurtido justo antes de empezar a comer sushi, y otra lámina más cada vez que pasemos de alguno de los infinitos tipos de sushi que existen a otro diferente.
¿Se debe comer el jengibre o gari con el sushi?
Si ves a alguien comiéndose al mismo tiempo una pieza de sushi y una lámina de jengibre, ¡debes saber que eso es un error garrafal!
¿Por qué? Pues porque, como hemos visto, el jengibre encurtido es intensidad en estado puro. Su sabor picante puede enmascarar por completo el del pescado crudo del sushi, que es mucho más sutil. De este modo, si los comes juntos, su efecto será justo el contrario.
Así que, si vienes a uno de nuestros restaurantes y te animas a probar distintos platos de sushi de la carta de Sibuya, te recomendamos llevarte a la boca una pequeña lámina de jengibre entre pieza y pieza. El efecto te sorprenderá de verdad. ¡Prometido!
Además, no olvides que el jengibre es un ingrediente conocido por sus maravillosas propiedades medicinales: es antiinflamatorio, mejora la circulación, favorece la digestión, fortalece nuestro sistema inmunitario… ¡Todo son ventajas!
Y si las combinas con los múltiples beneficios del sushi para la salud, mucho mejor. Pero, ya que estás, elige un sushi que de verdad merezca la pena. ¿Qué te parece el de Sibuya?
Si aún no has venido a vivir la eXperiencia del jengibre encurtido y el sushi por todo lo alto, te estamos esperando. No te hagas de rogar y reserva ya tu mesa en Sibuya. ¡No te arrepentirás!
