Es un plato refinado, original y versátil, por eso el tartar tiene fama internacional. Tanto es así que podría hacerse una versión de tartar para cada país del mundo, o incluso más. ¡Todo depende de los ingredientes con los que se prepare!
En Sibuya, nuestro favorito siempre será el tartar japonés, normalmente hecho con pescado, sésamo, wasabi o tobiko, entre otros. Ahora bien, ¿sabes cuál fue el verdadero origen del tartar? ¿O de qué suele hacerse normalmente este plato?
Si no tienes ni la más remota idea, no te preocupes. ¡Para eso estamos nosotros! En este post, resolvemos todas tus dudas sobre el plato crudo de moda.
¿Qué es el tartar japonés?
En la cocina japonesa, el tartar hace referencia a un plato de pescado crudo, habitualmente cortado en dados pequeños y acompañado de otros ingredientes, además de un buen aliño.
El salmón y el atún son los dos tipos de pescado por excelencia para preparar tartar japonés, aunque en realidad puede usarse cualquier pescado fresco. La verdadera diferencia está en el corte.
Una vez condimentados, a los cuadraditos de pescado se les da forma de montañita o cilindro. Y, por supuesto, el resultado se sirve en frío, para mantener el sabor y toda la frescura de sus ingredientes.
En definitiva, nuestro querido tartar japonés es un plato fresco y ligero, el mix perfecto entre la pureza del pescado crudo y el aliño que resalta su sabor. ¡Nos encanta!
El origen del tartar en Japón
El origen del tartar no es japonés, aunque seguro que lo has pensado alguna vez. Según cuenta la leyenda, este plato nació en realidad en la Polinesia Francesa en la época de los tártaros, quienes se dice que colocaban trozos de carne cruda bajo sus sillas de montar para ablandarla mientras cabalgaban. ¡Pero esto es solo un mito!
Lo que sí es seguro es que, con el tiempo, la receta viajó a Francia, donde el chef Auguste Escoffier la bautizó como tartar, después de añadir salsa tártara a los cuadraditos de carne cruda de res. Ahora su nombre cobra más sentido, ¿verdad?
Poco a poco, el steak tartare fue ganando fama entre los franceses y en el resto del continente europeo. Pero no fue hasta un tiempo después, ya en el siglo XX, cuando la idea llegó a Japón gracias a la fusión gastronómica.
Allí, los japoneses la reinterpretaron a su manera y, en lugar de carne, usaron pescados; una versión mucho más cercana a la tradición nipona de comer sushi o sashimi. También le incorporaron aliños propios de la cocina japonesa: soja, mirin, aceite de sésamo, wasabi, yuzu…
¿El resultado? La popularidad del tartar creció y creció, pasando a formar parte de todas las cartas de restaurantes japoneses en el país nipón. ¡Y también en el resto del mundo!
Cómo hacer tartar: ingredientes clave
Sin ir más lejos, en la carta de Sibuya tenemos tartar de atún, de salmón y de pez mantequilla. Para nosotros, esos son los tres ingredientes clave si te estás preguntando cómo hacer tartar. ¡Pero no son los únicos!
Además de una base de proteína formada por pescado fresco de calidad, puedes añadir:
- Aliño. Salsa de soja y un toque de aceite de sésamo, por ejemplo, para darle sabor umami.
- Cítricos, como zumo de lima o yuzu para darle más frescura.
- Aromáticos, como jengibre fresco, cebollino o incluso wasabi, para intensificar el sabor del tartar.
- Frutas y verduras. Aguacate también cortado en cubos, pepino, mango… ¡Lo que tú quieras!
- Un plus de originalidad, con semillas de sésamo, tobiko… y otros ingredientes que decoren y aporten contraste.
En Sibuya, nuestros tartares son una fusión perfecta de pescado crudo con verduras, frutas y distintos condimentos para chuparte los dedos. Pero no te queremos hacer spoiler, ¡mejor que los descubras tú mismo!
De qué se suele hacer el tartar
Aunque en el país nipón es menos habitual encontrarte con tartar de carne, lo cierto es que en Europa sí es muy probable que te encuentres con el mítico steak tartare, hecho con carne cruda de res, que se sirve mezclada con yema de huevo y otros condimentos.
En cualquier caso, el tartar es un plato de lo más versátil porque acepta todo tipo de bases. Eso sí, siempre crudas y picadas en dados pequeños.
Por ejemplo, también lo hay de marisco, o versiones vegetarianas y veganas como el tartar de aguacate y el de tomate. ¡Es una receta apta para todos los paladares!
¿Dónde degustar el mejor tartar?
Si después de leer este post te han entrado ganas de comer un buen tartar, ¿qué mejor lugar para hacerlo que cualquiera de nuestros restaurantes japoneses?
El tartar de Sibuya te entra por los ojos y te conquista por el estómago, ¡por eso es uno de nuestros platos más demandados!
¿Te gusta el pescado crudo y buscas algo que te sorprenda? En ese caso, no te lo pienses más: reserva tu mesa en Sibuya y ven a vivir la mejor eXperiencia de tartar japonés de tu vida. ¡Lo prometido es deuda!